Nueva Ley de Etiquetado de Alcoholes: Así funciona la normativa que entra en vigencia este domingo
Este próximo domingo 7 de julio entra en vigencia la nueva Ley de Etiquetado de Alcoholes, que expande la exigencia de etiquetas a las bebidas de graduación alcohólica igual o mayor a 0,5° que se comercializan en Chile.
La nueva ley establece, entre otras cosas, que los fabricantes e importadores deberán rotular las calorías de cada bebida alcohólica, junto con indicar advertencias sanitarias respecto al consumo de alcohol y su relación con el embarazo, la conducción y el consumo en menores de 18 años.
Según comunicó el Servicio Nacional del Consumidor (Sernac), esta norma no solo tiene el propósito de informar a las personas consumidoras sobre los riesgos asociados al consumo de alcohol, sino también de fomentar las prácticas de consumo más responsables.
La etiqueta de advertencia no podrá abarcar menos del 15% de la superficie de la cara o etiqueta posterior del respectivo envase, caja o embalaje.
De acuerdo al reglamento, el responsable de la adhesión de la advertencia será el productor o fabricante en el caso de los productos nacionales, y el importador cuando las bebidas sean importadas, debiendo cumplirse estas obligaciones previo a su comercialización.
Si bien la fiscalización de las nuevas materias de rotulación y publicidad le corresponderá al Ministerio de Salud, a través de sus Seremi de Salud de cada región, el Sernac también realizará un seguimiento a la implementación de la normativa.
Por ello, esta última entidad ejecutará acciones de fiscalización a las empresas que comercializan bebidas alcohólicas, ya sea de forma presencial o digital, en los diferentes sitios de comercio electrónico.
Según se indicó, la Ley de Protección de los Derechos de los Consumidores (LPDC) se complementa con la nueva Ley de Etiquetado de Alcoholes, ya que la información que deberá entregar a los consumidores se considera como Información Básica Comercial (IBC), que implica que las personas consumidoras:
Tienen derecho a que se les entregue información veraz, oportuna y comprobable sobre los bienes ofrecidos.
Tienen derecho a que la publicidad no induzca a error o engaño.
Tienen derecho a consumir alimentos que no afecten la salud.