El ministerio de Vivienda explora soluciones para evitar desalojo de la Toma de San Antonio

“Estamos trabajando en distintas soluciones y alternativas jurídicas, además de conversar con los dueños del terreno, porque la idea es llegar a un final que deje a todos satisfechos”, así reaccionó el ministro de Vivienda y Urbanismo, Carlos Montes, ante la resolución de la Justicia al “Téngase Presente” que introdujo la Delegación Presidencial de la región de Valparaíso que pretendía retrasar en un año el desalojo de la Toma de San Antonio, con el fin de buscar solucionar el conflicto.

Desde el Minvu han sido claros al señalar que respetan la decisión de la Corte de Apelaciones de la región, instancia que entregó la responsabilidad de la fecha del desalojo a los dueños del terreno y reconocen que esta situación abrió una puerta para llevar adelante una negociación entre todos los involucrados.

En el ministerio de Vivienda y Urbanismo aseguran que la solución más plausible es que las mismas familias compren el terreno a través de distintas cooperativas formadas por los propios pobladores, de hecho, ya hay 60 grupos de la toma que están dispuestos a constituirse en dichas asociaciones. Lo que es considerado una estrategia responsable, ya que así nadie se “salta la fila”.

La labor de negociación que ha asumido el ministerio con los pobladores y pobladoras, se complementa con el acercamiento que, también, está teniendo con los dueños de los terrenos, para conocer su disposición acerca de esta alternativa.

Así lo recalcó la seremi de Vivienda de la región de Valparaíso, Belén Paredes, quien destacó el trabajo con los dirigentes de la toma, recalcando que “nosotros ya nos hemos comunicado con ellos, indicando que el trabajo en terreno continúa al igual que la labor que busca establecer algún tipo de diálogo con los propietarios del terreno” y agregó que “acá lo que nos interesa es llegar a un arreglo que deje conformes a todos los involucrados”.

Finalmente, el ministro Montes señaló que “lo que a nosotros más nos interesa es poder materializar este trabajo en las cooperativas y formalizarlo, porque de esta manera podemos dar, también, cuenta de una nueva forma o estrategia de trabajar las ocupaciones en terrenos privados, por eso, conversar con los dueños de los terrenos es igual de importante. Necesitamos buena voluntad de todos los involucrados”.

“Las familias que están en la toma nos han dicho que ellos quieren aportar para comprar el terreno, a un plazo más largo y ponerse de acuerdo en los precios y en la forma de pago. De hecho, suscribieron una carta dirigida a los dueños manifestando ese interés. Para eso necesitamos más tiempo”, aseguró el ministro Montes.